Fases del primer encendido de prueba, Selección del combustible – MCZ Forma Wood 115 Manual del usuario
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MANUAL DE INSTALACIÓN Y USO
Capítulo 6
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Funcionamiento
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MCZ DECLINA TODA RESPONSABILIDAD POR LOS DAÑOS
QUE EL REVESTIMIENTO PUEDA SUFRIR SI NO SE
REALIZAN LOS CONTROLES DE PREVENCIÓN INDICADOS
Y HUBIERA QUE DEMOLIR TODO EL REVESTIMIENTO,
PARA REALIZAR REPARACIONES O REGULACIONES.
6.2.1. Fases del primer encendido de prueba
Asegurarse de haber leído y comprendido perfectamente el
contenido de este manual de instrucciones.
Quitar del hogar de la chimenea térmica y de la puerta todos los
componentes que se pudieran quemar (instrucciones y etiquetas
adhesivas de distinto tipo).
Quitar los adhesivos del vidrio cerámico. De no hacerlo, la elevada
temperatura puede derretirlos y dañar el vidrio de forma irreparable.
En este caso, MCZ no reconoce garantía alguna sobre el vidrio.
Abrir al máximo la entrada frontal de aire comburente.
Colocar pequeños pedazos de leña bien seca (humedad 15/20%).
Encender el fuego a régimen moderado, sin sobrecalentar en exceso
la estructura. Cualquier posible olor derivado de residuos de la
elaboración o de evaporación se formará en los primeros encendidos
y desaparecerá después de varios funcionamientos.
6.3.
SELECCIÓN DEL COMBUSTIBLE
Para obtener el máximo rendimiento de la chimenea térmica, es
fundamental utilizar leña de características adecuadas.
Se recomienda utilizar leña para calefacción como encina, haya,
fresno, robinia o roble, que tienen un rendimiento calorífico óptimo,
o bien pequeños troncos de madera prensados sin resina. Estas
últimas tienen un poder calorífico elevado y deben usarse con
cautela, a fin de evitar sobrecalentamientos que podrían
resultar perjudiciales para la chimenea térmica.
Se desaconseja el uso de combustibles como el chopo, el pino, el
tilo o el castaño, ya que tienen un bajo poder calorífico al ser leña
muy dulce, y su duración es muy breve.
Se recomienda evitar combustibles como pino, abeto u olivo, ya
que tienen elevados contenidos de resina y su combustión puede
ensuciar sensiblemente la boca del fuego y el vidrio cerámico, además
de no tener un rendimiento muy bueno.
Para todos los tipos de madera enumerados, resulta fundamental la
humedad que contienen, ya que determina el rendimiento calorífico.
No usar combustibles tratados (madera barnizada,
lacada o hecha virutas) o no adecuados (plástico o
derivados), ya que pueden liberar sustancias tóxicas
o contaminantes. No quemar desperdicios.
Los gases producidos durante la utilización de
combustibles no adecuados pueden causar daños a
la chimenea térmica, al cañón de humos, contaminar
y poner en peligro su salud.
Tiempo de secado
de la leña (por
ejemplo, haya)
Humeda
d %
Poder
calorífico
kcal/h
Recién cortada
50
/
3 meses
40
2410
6 meses
35
2700
9 meses
30
2900
12 meses
25
3150
15 meses
20
3400
18 meses
15
3710
21 meses
10
3980
Figura 11 – Rendimiento calorífico de la madera
(por ej. haya) en relación con la humedad
contenida.
Figura 10 – Regulación al máximo de la entrada
de aire comburente
MAX