FRITSCH PULVERISETTE 2 Manual del usuario
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1.3.2 Procedimiento
El uso de mortero y almirez es uno de los métodos más antiguos que se
conocen para la moledura de alimentos. Los arqueólogos hallaron un
mortero con una piedra moledora en Jordania, y calculan que debe de tener
unos 10.000 años de antigüedad. ¡Así que llevan existiendo bastante
tiempo!
El mortero eléctrico de laboratorio tritura los materiales aplicando presión y
fricción, al igual que los morteros con almirez manuales. Sin embargo, al
contrario que estos últimos, el bol del mortero de laboratorio se mueve por
medio de un motor - y el eje del almirez rotatorio se puede mover
horizontalmente. El tamaño relativamente grande del almirez asegura una
trituración y pulverización rápida y uniforme de la muestra.
Las sustancias pegajosas o adhesivas se pueden triturar en suspensión,
añadiendo líquido. Dicho líquido se puede agregar o rellenar durante el
proceso de pulverización. La muestra triturada se queda en el bol del
mortero, y es recogida de los laterales con una espátula Vulkollan
(poliuretano), la cual voltea la muestra como un arado y la expone de nuevo
al almirez.
A diferencia de otros morteros de mano, relativamente planos, el bol del
mortero de laboratorio es profundo y está cerrado y sellado con labios de
goma, así que no hay apenas pérdidas en la moledura. Los tiempos
ajustables de moledura y la presión regulable del almirez aseguran unas
condiciones de moledura consistentes – y es posible observar todo el
proceso, gracias a una ventana de Plexiglás.
Gracias a la constitución enormemente robusta del motor, del eje del almirez
y de todos los componentes móviles, el mortero de laboratorio puede
funcionar muchos años.
Pulverisette 2
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